Hormigón autocompactante: Características
Podemos definir la autocompactabilidad como la propiedad que presentan algunos hormigones de consistencia fluida y viscosa de compactarse sin necesidad de aportación de energía (vibración), rellenando los encofrados y discurriendo entre las armaduras sin que se produzca sangrado de la lechada ni bloqueo del árido grueso.
Sabiendo a qué nos referimos cuando hablamos de autocompactabilidad, podemos incorporar, a la definición inicialmente dada del hormigón autocompactante, el conjunto de sus características prestacionales de un modo directo. Así, diremos que un hormigón autocompactante añade a las prestaciones bien conocidas del hormigón convencional (de uso habitual), o del hormigón de altas prestaciones, tanto en términos de resistencia como de durabilidad, aquéllas específicas de la autocompactabilidad.
Características prestacionales del hormigón autocompactante
• Gran facilidad de colocación que permite que el hormigón alcance lugares de difícil acceso y rellene completamente secciones con elevada densidad de armaduras.
• Elimina los medios de compactación, ahorrando la energía correspondiente y evitando el elevado nivel de ruido que genera la vibración.
• Mejora la seguridad y salud en la obra al evitar, durante el proceso de puesta en obra del hormigón, el uso de mangueras con conductores de electricidad, la generación de ruidos y la realización de una actividad poco ergonómica como es el vibrado interno de la sección de hormigón.
• Mejora las condiciones medio ambientales en el entorno de las obras al evitar ruidos y reducir los plazos de ejecución.
• Es un material adecuado para colocarlo mediante bombeo.
• Ahorra el coste de los equipos de compactación y el correspondiente a la conservación y mantenimiento de los mismos, así como el inmovilizado en lista de repuestos.
• Ahorra el consumo de energía, generalmente eléctrica, utilizada en el proceso de puesta en obra del hormigón.
• Mejora la calidad de acabado de las superficies vistas, aumentando su uniformidad como consecuencia de eliminar la heterogeneidad que produce el vibrado.
• Acorta los plazos de ejecución.
• Aumenta el número de puestas del encofrado en la misma cantidad de tiempo.
• Reduce el coste global de la obra.
• Aumenta la productividad del proceso de puesta en obra del hormigón.